En virtud de una alianza estratégica entre ambas instituciones, profesionales titulados de la Universidad Autónoma de Chile podrán convertirse en monitores voluntarios para Acción Emprendedora, con el propósito de asesorar a microempresarios en la materialización de sus proyectos de negocios.
La directora Académica de esta organización no gubernamental, Ana Carvajal, señala que este programa está dirigido a reforzar iniciativas individuos y familiares que no han podido acceder a otras líneas de financiamiento.
“Ayudamos a una gran masa que no están dentro de los parámetros de los créditos o apoyos estatales, y que finalmente se ven forzados a la obtención de un crédito de consumo bancario o al apoyo financiero de un familiar. Es una clase media emergente a la que le cuesta salir adelante, y que están en Dicom o que experimentan endeudamientos”.
La profesional agrega que este proceso de ayuda se relaciona con el concepto de acompañamiento: “Lo que hacemos es apoyar y acompañar mediante herramientas técnicas, en áreas en donde ellos tienen falencias o desconocimiento. El emprendedor cree que sus problemas son sólo de él, pero con las asesorías externas se da cuenta que hay otros en situaciones similares. No siempre se producen soluciones determinadas, pero se produce una red de contención”.
Acción Emprendedora es una Organización No Gubernamental (ONG) sin fines de lucro, dedicada a la formación integral de microempresarios y emprendedores en sectores de alto impacto. Sus integrantes se especializan en el trabajo en terreno con microempresarios de los más diversos rubros.
Para ello, ha diseñado un completo y didáctico Curso de Gestión para microempresarios, el cual considera materias y actividades en áreas fundamentales para la microempresa tales como márketing, contabilidad, finanzas, aspectos legales y tributarios, recursos humanos, producción y control de gestión.
La experiencia en terreno
Luis Cornejo es uno de los voluntarios de Acción Emprendedora y desde hace un tiempo es asesor o facilitador de diversos proyectos. Durante varios años participó en distintos programas de voluntariado, pero asegura que fue en Acción Emprendedora donde encontró un lugar donde transmitir sus conocimientos y experiencias hacia iniciativas con procesos definidos y precisos.
“La realidad del emprendedor es muy viva, necesitas de ese acompañamiento cercano”, asegura. “Cuando me ha tocado ser facilitador de un taller, la evolución que se produce en su emprendimiento es mayor que en otros momentos en donde se trabaja en forma independiente”.
Las principales necesidades de los emprendedores se centran en las herramientas de gestión y orientación. “A nivel de perfil, la persona emprendedora es alguien que hace cosas. Entonces, a veces sólo es necesario que converse con otras y conozca casos similares”.
“Los voluntarios que somos parte de Acción Emprendedora nos sentimos integrantes de algo más grande que nosotros mismos. Esto significa dejar la individualidad de lado para darse a los demás”, destaca.
Para la selección de los facilitadores se consideran factores como alguna experiencia previa relacionada con el emprendimiento, la motivación social y, dependiendo del área específica, conocimiento técnico que ayude a la capacitación o consultoría.
Ana Carvajal especifica que la organización de los cursos de Acción Emprendedora implica un proceso muy riguroso de modo que los beneficiados del programa sientan que los conocimientos que se entregan sean útiles. “Pero también nos interesa que los facilitadores se sientan cómodos, con horarios posibles respecto de sus otras obligaciones”,
A su juicio esta iniciativa ha resultado ser muy positiva pues “te das cuenta que hay muchas personas que sólo quieren crecer y aportar al desarrollo del país. La mayoría de los emprendedores a los que guiamos tienen negocios tradicionales. Por ejemplo, en Concepción tenemos a dos hermanos que decidieron emprender en la creación de cervezas, se capacitaron y ahora distribuyen sus productos en restaurantes”.
La ejecutiva señala que Acción Emprendedora es una oportunidad para que los titulados de la Autónoma trabajen su veta social. No hay nada más gratuito que entregar conocimiento a personas que están dispuestas a escuchar y aprender”.