•El fin de semana pasado viajó a Talcahuano un equipo de la carrera de Trabajo Social de la Universidad Autónoma de Chile en Temuco, para entregar a los dirigentes vecinales de la población Santa Clara los resultados y problemas detectados tras la intervención post terremoto, realizada por estudiantes y académicos de la universidad durante el mes de marzo en este sector.
Acorde con la misión asumida por la Universidad Autónoma de Chile con el medio (en su declaración de formar profesionales socialmente responsables y comprometidos con el desarrollo regional y local), los estudiantes de Trabajo Social, en conjunto con un equipo de docentes de la universidad, implementaron un Plan de Intervención post terremoto aplicado a más de 3.000 personas que viven en la población Santa Clara de Talcahuano.
A través de esto, alumnos y docentes entregaron apoyo profesional, técnico, humano y material a los dirigentes vecinales de la población Santa Clara, además de exponer los resultados y los principales problemas detectados tras la intervención post terremoto realizada en este sector.
Mediante acciones como la elaboración de un catastro socio económico a más de 360 familias, conteo de las viviendas sin moradores y visitas domiciliarias, se estableció un informe que da cuenta de la realidad post catástrofe de los habitantes de la comunidad Santa Clara, lo que les permitirá poder denunciar de manera más concreta los principales problemas que hoy los aquejan.
Resultados informe:
Por medio de este estudio, el equipo de la carrera de Trabajo Social pudo establecer que en temas relacionados con la habitabilidad la situación es grave.
Del total de 367 viviendas que aún se encuentran en pie el 54.18 % están inhabitables; un 18.62% habitables parcialmente (con daños importantes) y un 27.21 % de ellas se encuentran habitables.
El informe establece también, que las condiciones medio ambientales son agresivas para los pobladores. Una descripción por observación directa, da cuenta de: calles destruidas, alcantarillas abiertas, barro y basurales acumulados por todas las vías de acceso; presencia de contaminación por fango orgánico descompuesto; presencia en aumento de ratas, ratones, moscas, gusanos, zancudos, perros vagos; percepción de la presencia de bacterias, virus y otros contaminantes para la salud de la población y extinción de flora doméstica (árboles, pasto, flores y otros quemados por la salinidad del agua).
Además el informe da cuenta de la instalación de un vertedero, por parte del municipio, de más de un kilómetro por 3 metros de alto, en los sectores aledaños a las viviendas, que cruza todo el borde costero y que fue instalado allí tras las limpiezas de la comuna.
Según el catastro elaborado por la carrera de Trabajo Social de la Universidad Autónoma de Chile existe también una gran falta de información respecto de los planes de reconstrucción y de soluciones habitacionales, así como de los requisitos a cumplir para ingresar a los planes de gobierno.
Mientras que la sensación de inseguridad por falta de muros de contención y de construcciones en humedales, crean resistencia en los vecinos para volver a este lugar.
Otro gran problema detectado, es el aumento de la cesantía en los pobladores y la falta de oportunidades laborales. Además de la falta de coordinación y de participación entre los vecinos y la autoridad local.
Población Santa Clara
El sector elegido para la intervención fue una de las zonas más asolada de la comuna de Talcahuano, donde se considera que la magnitud de la devastación fue 300 veces mayor que en la zona de la Araucanía. Además, la densidad poblacional hace que el sufrimiento personal sea de gran alcance, requiriendo de intervenciones sociales y emocionales asertivas y de carácter profesional.
El objetivo de la Carrera de Trabajo Social de la Universidad Autónoma de Chile fue aportar en la recuperación social y emocional de los habitantes de la Población Santa Clara.
El proyecto, que contempló la intervención en terreno por parte de un alto número de estudiantes, contó con recursos entregados por la Universidad Autónoma de Chile, la Universidad de Alicante de España, y aportes reunidos por los propios alumnos y docentes de la carrera, alcanzando un costo total de $3.450.000.