A cinco años de su puesta en marcha, el Programa de Violencia Intrafamiliar (VIF) de la Universidad Autónoma de Chile superó las 270 intervenciones durante 2013, enfocadas en la prevención y rehabilitación del delito al interior del grupo familiar y en los entornos en que se desenvuelven sus integrantes.
En virtud de los convenios de colaboración con Tribunales de Justicia y establecimientos de educacionales, el centro de atención en VIF se ha consolidado como un centro de referencia nivel regional en prevención, tratamiento y rehabilitación.
Es, además, una de las pocas iniciativas a nivel nacional que brinda terapia integral a imputados hombres y mujeres, a cargo de un equipo multidisciplinario de destacados académicos con el apoyo estudiantes en práctica de Psicología y Trabajo Social.
Así lo destacó la académica y coordinadora del área psicológica, Mg. Claudia Pavez, quien recordó que la mayoría de las iniciativas en esta materia están orientadas al trabajo con mujeres y con una cobertura limitada. De ese modo, el programa universitario otorga un valioso apoyo a la labor de los órganos de justicia.
En ese sentido, precisó que los agresores ingresan al Programa de Violencia Intrafamiliar UA derivados por el I y el XI Juzgados de Garantía. Las víctimas, en tanto, lo hacen por voluntad propia.
A ello se suma un sólido trabajo comunitario “que consta de actividades terapéuticas orientadas a la prevención primaria del maltrato en niños y adolescentes”, a partir de alianzas estratégicas con colegios y liceos.
El director de la carrera de Trabajo Social, Mg. Rodrigo Inatzu, indicó que las acciones en este ámbito se centran en “promover el buen trato, la resolución pacífica de conflictos y la igualdad de género y, con ello, incidir positivamente en la disminución de la violencia al interior de la familia”.