DSC_0544«Desafíos legales en los delitos de alta complejidad», fue el tema central de la clase inaugural del año académico de la carrera de Derecho de la Universidad Autónoma de Chile en Talca. La encargada de dictar está conferencia fue la reconocida abogada Catherine Lathrop.

Para el Director de la carrera, el abogado Ricardo Herrera,  este  tema es fundamental bajo los hechos acontecidos este último tiempo en el país donde la gestión y tramitación de los abogados cobran un importante papel. “Es un privilegio contar con la presencia de la distinguida colega Catherine Lathrop, quien está inmersa en estos procesos de carácter penal y quien puede transmitir su experiencia y la forma de enfrentar estos juicios, lo que es de vital relevancia para la enseñanza de nuestros alumnos”.

En efecto, Lathrop cuenta con un nutrido currículo que la posiciona como uno de los mejores abogados del país. Fue defensora penal pública (2005 a 2010) especialista en litigios Penales y de Familia, fue abogada de Alejandro Bohn y Marcelo Kemmeny, propietarios de una mina donde quedaron atrapados los 33 mineros. También representó a una empresa privada en el histórico acuerdo para compensar a los vecinos de Recoleta con obras por US$2,5 millones, caso que marcó un precedente en la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Y durante el último tiempo ha sido la abogada defensora de Hugo Bravo, el ex gerente del grupo Penta.

Con dichos antecedentes, la abogada fue la persona indicada para profundizar y compartir con estudiantes su experiencia sobre cómo un abogado debe manejarse frente a delitos de alta complejidad.

Cómo abordar este tipo de causas fue lo que marcó el inicio de esta clase magistral. “Una parte importante de cómo se abordan los temas de alta complejidad, guarda relación con las investigaciones que son previas en sedes administrativas como la Superintendencia  de bancos e instituciones financieras; Servicio de Impuestos Internos y, por otro lado, el tratamiento especial que tiene la ley de Lavado de Activos y el impacto que ésta tiene con la colaboración o no colaboración del imputado”, agregó Lathrop.

DSC_0630

Para la abogada, trabajar en causas de alta complejidad tiene varios ribetes. Primero, la complicación y el peso de la opinión pública, la que muchas requiere de una respuesta social más que una respuesta jurídica, siendo este el componente más difícil.  “Sin importar cuál sea la causa de alta complejidad, son todas complejas en sí de manejar, valga la redundancia. Creo que la diferencia la hace el componente social aparejado a ella y lo que la gente entiende respecto de ella. Por ejemplo, respecto a la colusión de las farmacias o La Polar, la gente entendía mucho menos,pero el impacto era mucho más potente que el Caso Penta”.

Otra de los aspectos que destacó la jurista fue cómo enfrentar la posición de un cliente en un delito de alta complejidad, teniendo en cuenta que la primera reacción es que muchos de ellos desean que lo que está pasando nunca haya sucedido. “Desde esta perspectiva lo primero que esperan  es que uno le diga ‘No te preocupes, esto lo vamos a hacer desaparecer’. Pero los expedientes, las investigaciones, los computadores, no desaparecen porque cuando caemos en esto lo que hacemos es hacernos partícipes en el hecho y no en asesores y para eso no estamos llamados. Debemos defender desde la realidad de los hechos”.

Asimismo, acentuó la importancia de tener una buena relación con el cliente. “Debemos ser capaces de entender y conocer el cien por ciento de lo que se nos presenta, es decir, no lo que nos presenta nuestro cliente porque éste al menos tiene tres problemas: uno, no quiere presentarse al proceso penal porque no quiere enfrentarse al dolor que le causa el proceso en sí y que muchas veces puede terminar en un pena efectiva. Dos, muchas veces no tiene la conciencia del injusto, porque ha normalizado su conducta por diversos motivos, el típico “pero si todo el mundo lo hace”. Por último, cuando la normalización es de tal tamaño que más bien, lisa y llanamente, te están mintiendo. En estas circunstancias mi mejor consejo es que ese cliente se busqué otro colega, pero que no sea uno el que lo defienda porque al final del día uno es conocido por las causas que lleva adelante y por los clientes que representa”.

Compartir en