Aquí empezó todo, en 1990. En una antigua casona arrendada en la calle Phillippi de Temuco, con dos carreras, menos de 160 estudiantes y el compromiso con la que es quizá una de las profesiones más nobles: educar e inspirar a los jóvenes a creer en sus talentos para crecer en lo personal y académico.

El sueño de fundar la Universidad no tenía como propósito apoyar sólo a los estudiantes. También a sus padres, porque hasta entonces la mayoría de quienes querían acceder a la educación superior estaban obligados a emigrar a otras ciudades y regiones, con todo lo que ello significa.

Crecimiento planificado y ordenado

En realidad,  nuestra historia comenzó al menos un año antes. En julio de 1989, el destacado abogado e Hijo Ilustre de la ciudad Dr. Teodoro Ribera Beneït (QEPD), convocó a destacadas personalidades de La Araucanía a sumarse al proyecto y fundaron la “Universidad Autónoma del Sur”.

Nuestros valores fundacionales eran nítidos y se mantienen hasta hoy, 35 años después: el respeto a la libertad personal, el desarrollo individual y social a través de la educación y la cultura; la responsabilidad, la ética y la calidad.

El nombre “del Sur” tenía sentido porque nacimos en Temuco. Pero el 2003 nos expandimos a Talca y Santiago y nos convertimos en Universidad Autónoma de Chile. Un desarrollo poco común en el sistema universitario chileno, porque lo usual era expandirse desde Santiago a regiones y no al revés.

Con ello, asumimos el desafío de evolucionar hacia una universidad más compleja, entendiendo que las fronteras de una institución de educación superior moderna van mucho más allá de la docencia en la sala de clases o el laboratorio.

Incorporamos entonces a nuestro quehacer la investigación y la vinculación con el medio, y seguimos creciendo en cantidad y calidad: más infraestructura y equipamiento; un ordenamiento organizacional acorde a esos desafíos; profesores de alta formación y experiencia; investigadores que con sus ideas buscan cambiar Chile y el mundo, y un compromiso con el trabajo colaborativo para mejorar el entorno.

Nuevas transformaciones

De una pequeña casona y un centenar de estudiantes en Temuco nos hemos transformado en una Universidad con más de 33 mil estudiantes y 44 mil titulados y graduados, que ocupa posiciones de liderazgo en Chile y América Latina según prestigiosos rankings internacionales.

Podemos consignar los avances, sin duda, pero también los desafíos. Ser “Más universidad” sigue siendo una inspiración para los próximos 35 años. Abriéndonos a la innovación y a un mundo cada vez más competitivo; avanzando en la transformación digital; revisando, ajustando y fortaleciendo nuestra carreras y postgrados; fortaleciendo la internacionalización y contribuyendo aún más al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.

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