Con el objetivo de impulsar la investigación aplicada en sus distintas sedes y facultades, la Universidad Autónoma de Chile está llevando a cabo el ciclo de talleres “Oportunidades y Estrategias para la Investigación Aplicada, Desarrollo e Innovación”, una iniciativa impulsada por el programa InES I+D.
Las jornadas, que ya se han realizado en diversas carreras, buscan entregar herramientas prácticas a académicos y académicas para potenciar sus capacidades en investigación, identificar oportunidades de financiamiento y formar comunidades de aprendizaje que permitan el desarrollo de proyectos con impacto territorial.
Cada sesión está a cargo de la Dirección de Innovación y Transferencia (DIT), que expone sobre normativa institucional, mecanismos de apoyo a la investigación y líneas de financiamiento disponibles, tanto internas como externas. Además, se promueve el diálogo entre docentes para compartir experiencias, necesidades y oportunidades de colaboración.
A la fecha se han realizado cerca de 6 charlas, siendo una de las últimas en la Facultad de Educación en la sede Temuco, con la participación de docentes de las seis carreras pedagógicas que la integran. Para Nathaly Vera, vicedecana de la Facultad de Educación, este tipo de instancias son fundamentales para democratizar el acceso al conocimiento y motivar a quienes están comenzando sus trayectorias investigativas.
“Es tremendamente relevante porque no todos los académicos cuentan con experiencia en investigación. Muchos están recién iniciando sus estudios doctorales, y saber qué recursos y apoyos entrega la universidad es clave para que se animen a desarrollar nuevas líneas. Este tipo de actividades puede ser el puntapié inicial para proyectos muy valiosos”, comentó.
Para Jaime Quilaqueo, coordinador del programa InES I+D, estos talleres son parte de una estrategia institucional para consolidar una cultura investigativa dentro de la universidad.
“Buscamos que cada facultad pueda transformar sus ideas en proyectos concretos con impacto real. Sabemos que hay talento, motivación y conocimientos, pero muchas veces faltan espacios de articulación. Este ciclo viene a cubrir esa necesidad y a proyectar la investigación desde el sur hacia todo el país”, explicó.
El enfoque territorial del programa permite identificar oportunidades propias de cada región, alineando el trabajo académico con los desafíos del entorno. A largo plazo, se espera que estas actividades deriven en la conformación de redes colaborativas y grupos de investigación interdisciplinarios.