
• La Araucanía apuesta por la producción y uso local de este recurso como motor de desarrollo sostenible, impulsando la descarbonización del sector productivo y la generación de empleo inclusivo.
La Universidad Autónoma de Chile ha sido el escenario de la Mesa Intersectorial de Hidrógeno Verde, instancia que celebra su segundo año de existencia con el propósito de fortalecer el desarrollo sostenible en la Región de La Araucanía. Bajo el título “Bien Público: Empoderando a los sectores agroforestales y productivos con Hidrógeno Verde, un camino hacia el desarrollo sostenible en la Región de La Araucanía”, el encuentro ha reunido actores públicos y privados en una apuesta por la producción y uso local de este recurso energético.
A diferencia de otras experiencias nacionales e internacionales, este modelo no prioriza la exportación del hidrógeno verde, sino que busca su utilización directa en el territorio. Esta estrategia podría posicionar a La Araucanía como un referente mundial, aprovechando sus características naturales para dinamizar el sector productivo, descarbonizar la economía regional y generar empleos sostenibles.
La iniciativa se perfila como un gran impulso para emprendedores e innovadores de la zona, promoviendo la transición hacia energías limpias. En este marco, instituciones académicas han desempeñado un rol clave, participando en estudios y seminarios orientados a profundizar el conocimiento y las aplicaciones de esta tecnología.
Carlos Peña, coordinador del Instituto de Ciencias Aplicadas de la Universidad Autónoma de Chile, destacó el compromiso de la institución con la investigación sobre hidrógeno verde: «Desde hace varios años, la Universidad ha trabajado en seminarios sobre energías sustentables, consolidando espacios de debate y desarrollo académico. En nuestra Sede de Santiago, llevamos tres años con un seminario especializado, y desde Temuco hemos impulsado estudios que buscan financiamiento para aplicaciones futuras en la industria agroalimentaria, lo que beneficiaría enormemente a la región».
Por su parte, el Seremi de Energía de La Araucanía, Camilo Villagrán, enfatizó el enfoque de la estrategia regional: «Nuestra prioridad no es exportar hidrógeno verde, sino generar y producir este recurso para abastecer la demanda local. Dado que nuestra economía se basa principalmente en la agricultura y el sector forestal, queremos focalizar su uso en la descarbonización productiva y la creación de empleos sostenibles, promoviendo un desarrollo inclusivo para la región”.
Eduardo Figueroa, director de Corfo Araucanía, resaltó la relevancia de esta iniciativa para el mundo emprendedor: «Existe una gran oportunidad para desarrollar proyectos innovadores vinculados al hidrógeno verde. Desde Corfo, estamos avanzando en estudios que permitirán integrar a La Araucanía en este sistema energético y facilitar su implementación en otras regiones».
Desde una perspectiva técnica, René Bañares-Alcántara, académico de la Universidad de Oxford, subrayó los desafíos de esta estrategia: «Es cierto que los recursos de energía renovable en la región no son comparables con los del norte y sur de Chile. Sin embargo, lo que sí es relevante es el alto costo del transporte y almacenamiento de hidrógeno. Producirlo localmente podría ser más costoso al inicio, pero reduciría significativamente los gastos logísticos, lo que eventualmente lo haría más competitivo”.
Además, esta iniciativa permitirá el desarrollo de una línea base ambiental que sirva como referencia para futuros proyectos de inversión, la realización de estudios que proyecten el uso potencial del hidrógeno verde en sectores como la agricultura y la producción de combustibles sintéticos limpios, la generación de material de apoyo para la formación de capital humano que posicione a la región como un proveedor especializado para la industria, y el diseño y perfeccionamiento de una gobernanza estratégica-operativa con políticas y lineamientos claros para la regulación y el crecimiento sostenible del sector.