Programa de Voluntariado y ONGs en convenio cierran el 2014 con emotivo desayuno
Los desafíos y proyecciones para el 2015 fueron algunos de los puntos que se abordaron durante el desayuno organizado por el Programa de Voluntariado de la Universidad Autónoma de Chile, en el que estuvieron presentes las organizaciones que son parte de la red de voluntariado de esta institución de educación superior.
En el encuentro, los representantes de las más de 30 entidades de acción social, valoraron el permanente aporte de esta casa de estudios al diseño y ejecución de algunos de sus numerosos programas.
El arquitecto de Fundación Junto al Barrio Álvaro Bravo, explicó que el sello de esta organización no gubernamental es el trabajo de voluntariado, “apuntando a que quienes nos colaboran no lo hagan sólo en una labor específica y luego se vayan, sino que realmente se encuentren con los vecinos, compartan con ellos y desarrollen finalmente un voluntariado más humano”.
El trabajo voluntario ayuda a los estudiantes también a desarrollar sus habilidades profesionales, guiándolos hacia un futuro laboral más consolidado. Es el caso de los alumnos de Derecho que colaboran con Fundación Gente de la Calle, entregando asesoría jurídica gratuita a personas en situación de vulnerabilidad.
Su director ejecutivo, Francisco Román, expresó su entusiasmo y agradecimiento al Programa de Voluntariado universitario. “Hemos sentido un trabajo serio y responsable de la Universidad Autónoma de Chile. Estamos muy motivados a seguir trabajando juntos y creando espacios para que los futuros profesionales se acerquen a la realidad de nuestro país y a la vez refuercen los conocimientos adquiridos durante su carrera”, explicó.
La Coordinadora de Voluntariado de esta universidad, Alejandra Cofré, destacó por su parte la oportunidad de compartir experiencias y anhelos con distintas ONG.
A su juicio, la jornada permitió adelantar algunas líneas de trabajo para el 2015 y fortalecer los lazos con cada una de las entidades. “Como programa, nuestra misión es ser punto de encuentro de las necesidades de la comunidad universitaria y las de las organizaciones. Por tanto, el vínculo formado es más que institucional; es un lazo entre personas que creemos en este tipo de trabajo”, concluyó.
Una de las misiones que desde el principio se planteó el programa de voluntariado fue entregar a los alumnos la posibilidad de vivir experiencias en comunidad que signifiquen un aporte tanto en el ámbito personal como profesional.
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