Más del 50 % de los escolares en Chile presenta sobrepeso u obesidad, según el Mapa Nutricional 2024 de JUNAEB, y más del 70 % no alcanza los 60 minutos diarios de actividad física recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Ante esta alarmante tendencia, el Dr. Felipe Caamaño, académico investigador de la Universidad Autónoma de Chile, lidera un proyecto Fondecyt Postdoctoral que busca analizar cómo la actividad física de alta intensidad en el contexto escolar puede influir positivamente en la cognición y la salud mental de estudiantes de 5 a 17 años. “Nos enfocamos en cuatro hábitos clave del estilo de vida, que son la actividad física, el tiempo frente a pantallas, la alimentación y las horas de sueño, y cómo estos influyen en la cognición y la salud mental de los estudiantes”, explica.
Activos y software cognitivo
El proyecto tiene como eje los “breaks activos”, sesiones de 10 a 12 minutos durante la jornada escolar con ejercicios de alta intensidad, que superan el 80 % de la frecuencia cardíaca. “Estas pausas combinan movimientos como saltos, sentarse y levantarse de la silla, skipping y juegos de agilidad. Buscan interrumpir los largos periodos de sedentarismo, estimulando tanto la actividad física como la cognición de los estudiantes”, detalla el doctor en Innovación Didáctica y Formación.
El estudio se desarrolla en escuelas de las comunas de Lautaro, Temuco, Padre Las Casas y Pitrufquén en La Araucanía, y en San José de la Mariquina, en Los Ríos, con estudiantes desde quinto básico hasta tercero medio. En 2025, la investigación se centró en una fase diagnóstica que evaluó 21 variables de cognición y salud mental mediante un software cognitivo de la empresa estadounidense Cognitive, que mide funciones ejecutivas a través de juegos interactivos en computador. “Con este software podemos evaluar memoria, atención y flexibilidad cognitiva, además de aspectos de salud mental como estrés, ansiedad y satisfacción con la vida, para entender cómo el estilo de vida impacta en los estudiantes”, dijo el investigador de 41 años.
La fase diagnóstica consideró a más de 1.300 escolares, evaluando hábitos de vida, funciones ejecutivas y salud mental. Para 2026 se proyecta la fase de intervención, en la que 100 estudiantes participarán en 24 sesiones de breaks activos, mientras un grupo control será evaluado sin recibir la intervención. El equipo de investigación incluye al Dr. Carlos Arriagada, Roberto Lagos y Carlos Gerardo Fuentes, junto a la colaboración de la Fundación del Magisterio de La Araucanía (FMDA).
Manual de activación
“Los resultados preliminares de 2025 muestran diferencias significativas en funciones ejecutivas y ciertos indicadores de salud mental entre estudiantes con hábitos más activos y aquellos más sedentarios. A partir de esta evidencia buscamos desarrollar un modelo de intervención replicable en escuelas de todo el país, con un manual que guíe a docentes en la implementación de breaks activos y estrategias de promoción de hábitos saludables. Buscamos generar un impacto positivo en la vida de los escolares, para que disfruten el movimiento, mejoren su salud mental y potencien sus capacidades cognitivas”, señala el Dr. Caamaño.
El proyecto Fondecyt Postdoctoral 2025-2027 cuenta con financiamiento de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) por $30 millones. “Es una valoración positiva, porque estos fondos nos permiten responder preguntas que son centrales en nuestro trabajo”, dijo Felipe Caamaño, quien ingresó a la U. Autónoma en 2022 y es profesor de la carrera de Pedagogía en Educación Física en la sede de Temuco.