Como parte de las actividades de recepción a los alumnos de primer año, la carrera de Ingeniería en Informática de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, organizó una jornada de motivación a los nuevos estudiantes con el objetivo de que conozcan experiencias de titulados y que se genere un sentido de pertenencia con la carrera.
La directora de la carrera, Magíster Jenny Morales, explicó que la idea de la actividad es que los alumnos “conozcan la experiencia de un titulado de la sede, ya sea tanto desde el punto de vista profesional como de sus experiencias independientes o dependientes. La idea también es que se puedan acercar a lo que es el campo laboral real, pensando en lo que ellos puedan desarrollar después en su vida profesional”, sostuvo.
En este contexto, el ex alumno de la carrera, Javier Corvalán, contó su historia de vida vinculada a la permanencia en la universidad, relatando que tuvo que ocupar todo el ingenio para poder costear sus estudios. De hecho, contó que empezando la carrera comenzó a realizar trabajos y asesorías en distintos ámbitos y que siempre se mantuvo atento a algún nicho que pudiera aprovechar.
Fue así como el trabajo comenzó a rendir sus frutos, desarrollando aplicaciones que le permitieron ganar dinero suficiente para pagar la carrera. Luego ya avanzados sus estudios formó su propia empresa con la que realizó trabajos en el sector educación, desarrollando una pizarra inteligente que tuvo muy buenos resultados y que concitó el interés del Ministerio de Educación.
Seguido a esto, formó una segunda empresa y hoy está formalizando una tercera compañía, con la cual espera seguir creciendo en el negocio informático. “Cuando entré a la universidad no tenía un peso en los bolsillos y tuve que ingeniármelas para financiarme. Empecé trabajando de a poquito, el primer y segundo año, y eso es lo conté a los alumnos para que sepan cómo logré lo que tengo ahora. Yo elegí ser independiente, tener mi empresa. He tenido dos. Ahora estoy constituyendo otra y eso fue lo que transmití, cómo fui creciendo y construyendo algo que nunca esperé y que gracias a Dios hoy puedo tener”, explicó Corvalán.
En la segunda parte de la actividad, los alumnos participaron en una dinámica motivacional con el objeto de realizar un acercamiento con los docentes y generar un sentido de pertenencia con la carrera.