Alumnos internacionales en Pomaire 1A partir de una de las combinaciones más simples del planeta, como es el agua y el barro, se puede dar origen a objetos de la más variada forma. Esa magia de la alfarería, fue la que experimentaron este viernes más de una decena de estudiantes de intercambio en la Universidad Autónoma de Chile, durante una jornada entera dedicada a las tradiciones chilenas.

Convocados por la Coordinación de Movilidad Internacional, los alumnos comenzaron su viaje en Pomaire, donde tuvieron la oportunidad de trabajar como artesanos y revivir un arte heredada de los indígenas diaguitas y que hoy es la principal actividad de esa pequeña localidad ubicada a 70 kilómetros de Santiago.

Durante el recorrido por las calles del pueblo, descubrieron parte de las costumbres y la gastronomía más típicas de la zona. Casas de adobe, pequeños puestos para la exhibición y venta de artesanías varias y una infinita variedad de productos hechos de greda: desde platos hasta adornos; de pailas a maceteros. Cazuelas, empanadas, motes con huesillos y otros cientos de degustaciones con el toque inconfundible de los más nobles productos de la tierra.

Pero la experiencia no sería completa sin vivir la experiencia de fabricar sus propias artesanías. Por eso, con la ayuda de un experto que es ya la tercera generación de artesano alfarero en su familia, cada uno de los estudiantes puso literalmente manos a la obra.

IMG_273952396593493“Nunca antes había tenido la oportunidad de trabajar con greda; elaboramos nuestro propio objeto dejando volar nuestra imaginación”, dijo Cynthia de Luna, estudiante de intercambio de la Universidad Autónoma de Coahuila en México. “Fue sencilla gracias a la explicación y apoyo de la persona capacitada que nos fue guiando”.

Más tarde el grupo se trasladó a Isla Negra, donde está una de las residencias y hoy Casa Museo del poeta Pablo Neruda. Un paseo por la historia de la literatura nacional con su increíble colección de conchas marinas, una gran chimenea y dos llamativos mascarones de proa -bautizados como La Meduza y La María Celeste- que alguna vez  surcaron con hidalguía mares y océanos.

La alumna de Psicología destacó la emoción de conocer la que fuera la casa de “uno de los mejores escritores latinoamericanos”, calificando la experiencia como “sorprendente”.

El paseo se enmarcó en el ciclo de actividades preparadas por la Coordinación de Movilidad Internacional con el propósito de acercar la cultura nacional e integrar a los alumnos extranjeros que cada año eligen la Universidad Autónoma de Chile para cursar parte de sus estudios fuera de sus países de origen.

Durante el semestre otoño 2014 se integró a la Universidad Autónoma de Chile más de medio centenar de alumnos internacionales, como parte de las estrategias de internacionalización universitaria.

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