La Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), el encuentro editorial más importante de Iberoamérica, reunió entre el 29 de noviembre y el 7 de diciembre a cientos de editoriales, autores y profesionales del libro de todo el mundo. En esta edición, tuvo una destacada participación la directora de Ediciones Universidad Autónoma, Isidora Sesnic.
El programa de la FIL 2025 incluyó una amplia variedad de actividades en torno a la poesía, la narrativa, el arte, la ciencia y otros ámbitos, desarrolladas a través de encuentros literarios, charlas, conversatorios y ceremonias de premiación.
Sesnic, quien además asistió como representante de la Red de Editoriales Universitarias Chilenas (REDUCH), destacó especialmente un hito en el que ella participó: “Lo que más destaco es la firma del Consejo Iberoamericano de Ediciones Universitarias y Académicas, una iniciativa que se gestó el año pasado en la FIL Guadalajara y que este año ya se hace realidad. Es un compromiso de todas las editoriales universitarias iberoamericanas”, señaló.
Se trata de un proyecto que marca un hito en la cooperación académica y científica regional, y que fue firmado por quince asociaciones internacionales de editores universitarios. “Este acuerdo busca fortalecer las buenas prácticas editoriales, promover la edición de calidad y proteger el español y el portugués como lenguas científicas”, añadió.
El Consejo definió nueve líneas estratégicas iniciales para guiar su trabajo. La primera de ellas apunta a promover buenas prácticas y altos estándares en la edición académica y herramientas que contribuyen directamente al reconocimiento de las publicaciones de investigadores e investigadoras.
Durante su participación en la FIL, Sesnic también representó a la Universidad Autónoma y a REDUCH en la mesa directiva de la Asociación de Editoriales Universitarias de América Latina y el Caribe (EULAC), organización que reúne a más de 400 editoriales pertenecientes a doce asociaciones y redes nacionales.
“La experiencia fue sumamente positiva, pude conocer el trabajo de otros países y también comprender el valor de nuestra organización REDUCH, a pesar de los obstáculos aparentes. Chile tiene mucho potencial y está siendo observado por los colegas del resto del continente. Nuestra política de acceso abierto generó interés y se abrieron nuevos puentes de comunicación con editoriales de Perú y Ecuador”, finalizó.