Con el apoyo de la Autónoma cooperativa mapuche apuesta por la venta del camarón de vega
Luego de dos meses de intensas jornadas de capacitación y trabajo en terreno, treinta camaroneros de Nueva Imperial y Carahue recibieron la certificación que acreditó los nuevos conocimientos adquiridos para el cultivo y explotación del camarón de vega.
Fue la Cooperativa Agrícola Campesina Machew Mapu de Imperialito la que aprendió acerca de materias como emprendimiento, innovación y conceptos técnicos que les permitirán obtener un crustáceo de mejor calidad, evitando su extinción, en armonía con la naturaleza y la cosmovisión mapuche.
“Queremos evitar la sobre explotación del camarón, tenerlos en custodia, conocer su crecimiento y llevar un registro sobre él. No dejamos de soñar con ver a nuestro producto recorriendo el mundo”, explicó José Huinca, presidente de la Cooperativa Machew Mapu.
Gracias al Instituto de Estudios del Hábitat de la Universidad Autónoma de Chile y Conadi, los camaroneros se perfeccionaron en el rubro y recorrer el globo gracias a un producto nacido en la Vega Imperialito con sello y sabor Araucanía.
“Para la Universidad Autónoma de Chile es básico el trabajo que estamos haciendo en sectores rurales. Es mejorar su calidad de vida. Los productos a nivel internacional son de denominación de origen y éste tiene la particularidad de ser de mano indígena. Tenemos una serie de productos que son exclusivos de nuestra Región”, dijo la directora del Instituto del Hábitat de la Universidad Autónoma de Chile, Claudia Lillo.
“Lo que la Cooperativa quiere es efectuar un plan de manejo en el sector del humedal para obtener un producto gourmet comercializable en el mercado. Eso es lo que estamos apoyando. Son jóvenes y adultos con muchas ganas de emprender”, dijo Jaime Huincahue Melipil, consejero nacional de Conadi.
Ahora comienzan nuevos desafíos para la Cooperativa tras adjudicarse un proyecto de Innovación Agraria que consiste en estudiar las características de los camarones y ver cómo se pueden disminuir los periodos de producción y aminorar el impacto medioambiental de la extracción.
“El objetivo es dar un valor agregado al producto camarón. En la época de invierno se extrae y se comercializa a un precio menor. El camarón de vega tiene muy buen sabor y una carne de alrededor de un 16% de contenido proteico en base humedal y en términos comparativos tiene buen tamaño y su contenido en carne varía entre un 10 y un 40%”, dijo el científico experto en crustáceos de Río, Erich Rudolph.
De esta manera los camaroneros artesanales que hasta hace poco tiempo atrás vendían sus productos a orillas de la carretera, podrán incrementar sus ingresos y mejorar su estándar de vida, promoviendo el desarrollo de La Araucanía en torno al crustáceo de Imperialito.