La salud bucal como derecho y no privilegio es uno de los principios que sustentan la labor de Fundación Sonrisas. Pero las dificultades de acceso y la baja valoración de su importancia son factores clave de la alta prevalencia de mujeres y hombres con un gran daño bucal.
Como una forma de colaborar a revertir esta realidad y promover la responsabilidad social, la Universidad Autónoma de Chile donó $2,1 millones a esa fundación, que corresponde al 100% de lo recaudado por sus alumnos durante sus actividades de la Semana Mechona 2019.

El aporte fue entregado al presidente del directorio de Fundación Sonrisas, Francisco Ortiz, por el Vicerrector de la Sede Santiago, Francisco Baghetti, junto a la coordinadora de la Unidad de RSU, Alejandra Cofré, el coordinador de Asuntos Estudiantiles del campus Providencia, Cristián Cifuentes, y dirigentes de Centros de Estudiantes de distintas carreras.

Junto con agradecer el apoyo, Ortúzar destacó que “en Chile hay una necesidad insatisfecha, que es volver a sonreír en plenitud, lo que dificulta su autoestima, su empleabilidad y finalmente su capacidad de ser felices”.

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A su juicio, “el rol de la academia es fundamental en el entorno que estamos creando desde Fundación Sonrisas. La Universidad forma profesionales, por ejemplo cirujano dentistas, cuya labor no es tan solo técnica sino también humana”.

En esa misma línea, la presidenta de los alumnos de Ingeniería Civil Industrial, Valentina Navea, destacó el valor de haber dado un sentido social a las actividades de bienvenida de los estudiantes nuevos en Santiago.

“Es muy importante para nosotros conocer las realidades de otras personas, de las que a veces no nos damos cuenta. Creo que en todas las carreras es importante ser un profesional humano y empático; eso es algo que siempre ayuda”.

Por su parte, el Vicerrector de la sede Santiago, Francisco Baghetti, señaló que “para la Universidad Autónoma de Chile es un honor contribuir al trabajo de Fundación Sonrisas”.

“Nuestra labor excede el trabajo en las aulas: llevamos adelante investigación y nos vinculamos con nuestro entorno a través de distintas iniciativas académicas, culturales y de responsabilidad social, junto al compromiso activo de nuestros estudiantes”.

Recordó que uno de los ejes de su modelo educativo es la responsabilidad social, entendida como una herramienta para responder a las necesidades y transformaciones de la sociedad actual.

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