Pese a que el COVID-19 lleva aproximadamente 5 meses presente en nuestro país, nunca está de más recordar las precauciones para evitar contagios.
Y ya que no basta solo con usar la mascarilla, lavarse las manos y desinfectar productos, siendo lo esencial entender que las medidas de protección están pensadas para ser usadas de manera eficiente, la docente, perteneciente a la Unidad de Especialidades Médicas de la Universidad Autónoma en Talca, Mg. Carol Zúñiga, hace hincapié en esta materia. ”Las mascarillas deben cubrir completamente la nariz y la boca, estar siempre secas para que sirvan, ser de doble capa y tener filtro. Deben ser lavadas cada vez que se vuelve a casa y sacarlas de la cara utilizando solo los elásticos de los lados. Si esto no se respeta, se crea una falsa sensación de protección, ya que pensamos que solo con portarlas estamos resguardados y definitivamente no es así. El virus puede estar en casi todas partes y el uso de mascarillas, evita que respiremos el microorganismo y que en caso de que tengamos el virus sin saberlo, no se esparza al medio y quede en la tela de la mascarilla”, destacó Zúñiga.

Docente Carol ZunigaPor otra parte, debemos tomar especial cuidado con los productos que ingresan a nuestro hogar. Las compras con delivery se han triplicado en los últimos meses producto del confinamiento y es fundamental tomar los resguardos sanitarios. “Cuando se reciben productos es necesario lavarlos si es posible, ya que así el virus se elimina “por arrastre”. En caso de imposibilidad de poner bajo el agua, utilizar un paño con solución jabonosa. Existen hoy en el mercado varias alternativas con productos detergentes. Recordemos que para combatir el COVID no hace falta más que usar detergentes dada la labilidad del virus a estos productos”, describe Zúñiga.

Uno de los puntos a los que no hemos puesta suficiente atención, es cuando tocamos nuestra cara, ojos o nariz. “Este virus es capaz de ingresar por mucosas, por lo que el contacto de nuestras manos contaminadas con estas partes del cuerpo, es también una puerta de entrada al virus. Cada vez que estemos fuera de nuestro hogar, debemos evitar tocar cara, ojos, nariz y boca. Esto no es fácil, dado que la mayor parte de las veces, no somos conscientes de hacerlo. La protección personal pasa por una serie de medidas para cuidarnos y cuidar de los nuestros. No es la mascarilla por sí sola, ni el lavado de manos por sí solo, es la sinergia de todas las posibilidades de cuidado y estas mismas bien efectuadas. De lo contrario, corremos el riesgo de sentirnos seguros de forma equivocada; creemos estar haciendo lo que se debe, pero lo estamos haciendo de forma incorrecta”, finalizó Zúñiga.

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