Autoridades de gobierno, ejecutivos de compañías privadas, investigadores y dirigentes gremiales expusieron este martes en el seminario “Minería: por un Chile mejor con trabajo e innovación” organizado en Santiago por la Universidad Autónoma de Chile y el Instituto Libertad, actividad que congregó a algunos de los actores más importantes de una industria que representa sobre el 10% del PIB nacional.
Al inaugurar la jornada, el Subsecretario de Minería, Ignacio Moreno, coincidió en que la industria “sigue siendo el pulmón industrial del país”.
“No hay ningún otro sector en Chile con la capacidad que tiene la minería para generar impactos positivos en la economía, como lo ha hecho por ejemplo en materia de innovación. Lo va a seguir siendo por mucho tiempo, pues sus reservas permiten proyectar sus actuales volúmenes de producción por al menos 50 años más”.
La autoridad ministerial destacó el aporte del seminario a la discusión del presente y futuro del sector y al diseño y aplicación de políticas públicas. En ese sentido, resaltó el papel de las instituciones de educación superior en la formación profesional y muy especialmente en investigación.
Uno de ellos fue el gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería, SONAMI, Álvaro Merino, quien subrayó el impacto social de esta actividad, señalando que “uno de cada cinco pesos que recibió el Fisco durante la última década fue aportado por el sector minero, lo que representa cerca de US$86 mil millones” incluyendo los excedentes de CODELCO y de las empresas privadas.
Esta cifra que –acotó- equivale a la construcción de cinco millones de viviendas sociales de un valor de 400 UF cada una, o 330 hospitales como el de la comuna de La Florida.
A su juicio, las perspectivas de este sector están condicionadas por diversos factores propios y externos. “Uno de los principales desafíos estratégicos que enfrenta la minería es recuperar la competitividad internacional; ello se ha expresado en importantes alzas de los costos y una disminución de los niveles de productividad”.
Por ello, destacó entre las tareas prioritarias el optimizar los procesos productivos y de gestión, fortalecer la capacitación permanente de sus trabajadores y la innovación. Pero también dijo que en materia energética “se requiere asegurar el suministro a largo plazo y a precios competitivos. Necesitamos también asegurar el suministro de agua pues sin este recurso la actividad minera es imposible”.
Al respecto, el Vicerrector de la Universidad Autónoma de Chile en Santiago, Francisco Baghetti, sostuvo que la academia “tiene que adecuarse a las innovaciones en la minería, para así formar profesionales más competitivos”. “La actividad minera comienza con la exploración y termina con el beneficio a los distintos actores vinculados a ella, por ejemplo las comunidades en que se ejecutan los proyectos. Cada una de esas etapas requiere de profesionales especializados”, precisó.
En esa misma línea, el presidente del Instituto Libertad, Roberto Ossandón, hizo hincapié en el trabajo conjunto que pueden realizar las universidades y los centros de estudio como el que encabeza. “Son iniciativas que no sólo es necesario apoyar sino proyectar en el tiempo., institutos de estudios como el esfuerzo realizado en conjunto con esta institución de educación superior orientado hacia la discusión de políticas públicas al más alto nivel. “La academia juego un rol importante en discutir, conversar y elaborar propuestas para el desarrollo del país y de la actividad minera sustentable en particular, que tanto ha aportado al país”.
En el seminario participaron ejecutivos de Antofagasta Minerals, Bio Lantanidos, DMO Minerals y el Consejo Minero, entre otros, quienes dieron a conocer experiencias innovadoras en áreas como el clima organizacional y el cambio cultural, las oportunidades laborales para mujeres, la innovación en concentrados de Tierras raras y las aplicaciones de las nanopartículas de cobre.