Varios días de celebración, que consideran comidas familiares, encuentros bien regados con los amigos, paseos y hasta mini vacaciones, forman parte de las Fiestas Patrias que por estos días inundan nuestro espíritu rebosante de alegría y chilenidad.

En este contexto, el sentido es solo uno: pasarlo bien con nuestros seres queridos y darle un paréntesis al estrés y preocupaciones del segundo semestre del año. Pero, ¿qué hay tras todo ello que nos une y nos motiva a compartir? ¿es nuestra manera de celebrar la chilenidad o exacerbarla?

El sociólogo Claudio Vásquez, coordinador de la unidad de estudios del Centro de Estudios y Gestión Social del Maule (CEGES) de la Universidad Autónoma de Chile, nos entrega algunas claves para comprender este momento nacional y, para ello, nos remota a los inicios de la república.

PrimeraJuntaNacionalDeGobierno(Chile)“Cuando reflexiono acerca de lo que celebramos cuando festejamos las Fiestas Patrias, se me viene a la mente la imagen de la primera Junta Nacional de Gobierno, encabezada por Mateo de Toro y Zambrano, la cual se efectuó el 18 de septiembre de 1810, en la ciudad de Santiago, como un primer intento de establecer un autogobierno, pero jurándole lealtad al Rey de España”, rememora.

“Se dice que esta fue la primera instancia en la que la gente salió a las calles a celebrar masivamente este acto de incipiente rebeldía, que se consagraría 8 años más tarde con la jura de la Independencia (12 febrero de 1818). De esta manera, las Fiestas Patrias vendrían siendo el “Cumpleaños de Chile”, en el cual se conmemora su nacimiento como proyecto de autogobierno, que decantaría, casi una década después, en la Constitución de la República Independiente y Soberana de Chile”, explica Vásquez.

No obstante, para el sociólogo “la solemnidad de tamaña hazaña es soslayada por el sentido que actualmente ha tomado la conmemoración de esta fecha en la actualidad: 206 años después, para la mayoría de los chilenos esta es una fecha que significa pasarlo bien, o sea, comer harto, beber sin remordimiento y bailar”, agregando que “probablemente, para una minoría creciente, significa “mini vacaciones” fuera del país, aprovechando las promociones de viajes de la temporada”.

Foto Claudio Vásquez WiedemanSobre este punto, señala que esta fiesta nacional “implica, de manera transversal, compartir en familia, celebrar y festejar en torno a un asado y, por sobretodo, construir identidad cultural de manera transgeneracional, los más viejos con los más jóvenes”.

Según concluye Vásquez, “aquí es precisamente donde se construye la chilenidad, en la decantación y traspaso de valores culturales en torno a la unión familiar, construyendo comunidad, independiente si se baila cueca o reggaetón”.

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